Este 11 de octubre se celebra el día de la mujer boliviana en homenaje a Adela Zamudio, ícono de la población femenina por su constante lucha por la participación de las mujeres en las actividades de la sociedad. Esta fecha nos encuentra en circunstancias no muy alentadoras pues pese a los avances en cuanto a la participación democrática aún persisten las grandes diferencias de género como en el pasado.
De los tiempos de Zamudio (1854) a nuestros días se perciben grandes cambios. En la última década, en Bolivia se ha logrado avanzar en la formulación de leyes, normas, y políticas en temas que son considerados estratégicos para promover la equidad, tales como la coparticipación de las mujeres en el ámbito político. Sin embargo, aún existe un camino largo por delante, pues día a día las noticias reflejan el constante atropello a los derechos de las mujeres, como violencia doméstica y el feminicidio.
Así sostiene, por ejemplo, un reciente reporte de las Naciones Unidas que indica que «según diversas fuentes oficiales, en Bolivia nueve de cada 10 mujeres sufren algún tipo de violencia, y se registra un feminicidio cada tres días. De cada 10 hechos violentos contra mujeres, sólo tres son denunciados».
Así también , estudios relativos a la distribución de la variable género, evidencia la constante desventaja para las mujeres en indicadores como pobreza, violencia, analfabetismo, empleo, seguridad social, entre muchos otros, convirtiéndolas en un sector vulnerable de la sociedad.
(Fuente de las estadísticas: Los Tiempos)
En ese sentido, si bien hay avances y medidas dirigidas a afrontar todas estas problemáticas, si es que las mujeres no asumimos la importancia de encarar temas como la violencia, los avances quedan en meros intentos. Es así que la lucha por la reivindicación de los derechos de las mujeres parte de una misma, desde el respeto y amor propio para poder frenar el abuso y la violencia dentro del hogar para luego poder afrontarla de forma conjunta en la sociedad.
Redacción Mujeres 360